Hoy por hoy la multiplicidad de programas en comunicación organizacional y
relaciones públicas nos permite por fortuna contar con un variado grupo de
profesionales en comunicación para asesorar a las organizaciones que en esta
área lo requiere, ello ha permitido que desde el interior de nuestro campo se
formulen preguntas transcendentales sobre nuestra formación, el aporte a las
empresas y nuestra contribución a este campo del conocimiento.
El presente ejercicio pretende resolver una pregunta fundamental, “¿cómo
saber si ha alcanzado el rango de experto en comunicación organizacional y
relaciones públicas?”. Comparando con otras ramas del conocimiento como la
psicología, la medicina e incluso experiencias de la ingeniería, se construye
esta propuesta desde dos vertientes fundamentales: la preparación académica y
la experiencia, dentro de la cual incluimos los aportes al campo para plantear
la siguiente estructura autoevaluativa.
Ahora bien, ¿qué pretendemos al responder esta pregunta? Los objetivos a
suplir en el fondo son tres: el primero a cubrir será la construcción de un
referente de mejora- miento personal y profesional en el campo, que nos permita
tener escenarios comparativos y autoevaluables para nuestras propias
iniciativas de mejoramiento; el segundo objetivo del ejercicio es la generación
de un escenario de evaluación y autoevaluación para profesionales, docentes y
consultores, con el ánimo de articular conocimiento sobre el tema; lo cual nos
conducirá al tercer objetivo, este es la generación de un escenario propicio
para la innovación y el desarrollo de nuevo conocimiento.
Es así que iniciaremos este ejercicio con cinco escenarios de evaluación:
preparación, experiencia, divulgación del conocimiento, generación del
conocimiento tangible y aporte profesional al campo; cada uno de los escenarios
tiene un puntaje de 200 pun- tos, para un total de 1.000, donde podremos saber
a ciencia cierta si somos o no expertos en comunicación organizacional y
relaciones públicas.
1. Experto consultor
Prepárese
entonces para realizar una evaluación en cinco escenarios como vertientes
fundamentales para evaluar su experticia y poder calificarse usted mismo como
un experto en comunicación organizacional y relaciones públicas.
1. Preparación
El primer escenario a evaluar es su formación; en este escenario el experto
debe contar con una preparación académica amplia que le permita garantizar un
respaldo de la función que ofrece, en este caso el pregrado equivale a 50
puntos, cursos intermedios de posgrado darán otros 50 puntos, 50 puntos de
maestría y 50 puntos del doctorado.
Evaluar el conocimiento permitirá saber qué tan preparado está y qué tan
especializada es la información a la que ha tenido acceso para formar su
criterio profesional. Se busca que la persona tenga una disciplina académica
para tener un criterio profesional especializado a la hora de tomar decisiones
en cuanto a comunicación se refiere.
2. Experiencia
Consiste en que el conocimiento se adquiera no sólo en el proceso de
formación académica sino también con la práctica.
Nuestro campo de acción, al ser un escenario práctico, será otro de los
frentes a evaluar en este ejercicio, las horas y los años dedicados a nuestra
labor no solamente nos permiten apropiarnos de experiencias enriquecedoras,
sino además construir para nosotros mismos conocimientos y metodologías que han
de nutrir y contribuir a nuestra propia técnica profesional. Es así que nuestra
experiencia nos permite construir un criterio real y no abstracto de lo que debe
ser el ejercicio de nuestra profesión.
En este escenario la experiencia se evaluará en tiempo, por ejemplo; 5
puntos por año laborado, esto significa que si la persona ya cuenta con un buen
tiempo, su experiencia le permitirá formar cierto criterio básico.
El otro aspecto son los años laborados en cargos gerenciales, esto
significa que no solamente esta persona hace tareas referidas a comunicación,
sino que además tiene la capacidad de tomar decisiones con un criterio más
estratégico.
Finalmente, las horas de consultoría son el aspecto característico de la
persona que es capaz de acompañar, asesorar o sugerir decisiones para
diferentes tipos de empresa (en este caso se toma un punto por cada hora
certificada). Lo ideal es lograr un nivel de 200 puntos.
3. Divulgación de conocimiento
El conocimiento y nuestra experiencia nos permiten construir un criterio
reconocido por nuestros clientes y por organizaciones locales, nacionales e
internacionales. Compartir ese conocimiento nos brinda la posibilidad de compararlo,
darle veracidad al foguearlo en distintos escenarios y convertir nuestra
experiencia en elementos comparables con otros profesionales del oficio.
Este frente de acción evalúa el reconocimiento que otros dan a nuestro
ejercicio profesional, es así que, en la medida en que se amplié nuestro
círculo de conocimiento (de lo local a lo internacional), estaremos hablando
además de la confianza que podrán tener quienes nos contratan sobre la solidez
de nuestro criterio. Ya que, cuando nuestra reputación transciende las
fronteras nacionales significa que colegas asociados al sector toman como
referencia nuestro conocimiento.
Cabe resaltar que es importante que una persona que suma horas de
consultoría en temas de comunicación, ocasionalmente debe dedicarse al menos
una vez al año a transmitir su conocimiento, pues esto le permitirá
contrastarlo y fortalecerlo.
Para este escenario, se tomarán como referentes las horas de docencia
anuales en el país de origen, esto se dividirá entre pregrado y posgrado, dependiendo
el nivel de especialización; se tendrán en cuenta las horas de docencia al año
en un país distinto al de su origen, vale la pena resaltar que es de vital
importancia compartir el conocimiento en otras culturas, escenarios y bajo
otras metodologías de trabajo, pues esto permite comparar y aportar al
conocimiento en otros países.
4. Generación del conocimiento
tangible
“Usted no sabe nada a menos que pueda ponerlo por escrito”, reza un adagio
de autor desconocido. Este escenario nos permite exponer ante un grupo más
amplio de colegas nuestro conocimiento para ser comparado y comentado, ponerlo
al fuego de la opinión de nuestros colegas o de profesionales de otras
latitudes nos permitirá corroborar su validez en el campo.
Contables:
200 puntos.
Al escribir usted podrá plantear sus posturas y verificar la validez de sus
propuestas. De otra forma se corre el riesgo, como sucede en algunas ocasiones,
de encontrar oradores muy convincentes que han obtenido un conocimiento de
otras personas, pero sin experiencia y pretenden reproducirlo en el sector a
manera de grandes gurús de papel.
5. Aportes metodológicos
En este punto se habla de innovación, que se
refiere al criterio. El conocimiento y la experiencia permiten generar aportes
de tecnologías donde se generan mejoras en las prácticas y se comparten con
otros colegas.
Si se logra generar propuestas de mejora en
diagnósticos de comunicación, se ob- tendrán 50 puntos; por las mejoras en
modelos de comunicaciones, se tendrán 100 puntos; y finalmente por modelos de
estrategia se ganarán otros 100 puntos.
Escenarios de evaluación, programa, ¿cómo convertirse en un
experto en Comunicación Organizacional y RRPP?